Foreign hearts, unknown travel & destinations

Tres días escasos en Oporto, parece que no darán para mucho, pero no es así. Oporto (Porto) tiene no más de 250k habitantes, así que es una ciudad bastante pequeña. La ciudad es bonita tiene un barrio viejo encantador a orillas del rio y muchos edificios singulares.

Veamos.

Hotel: El Eurostars Porto Douro. Quizá en el centro, centro, se esté mejor, pero a mi me pareció una muy buena opción. Me encantó el hotel y tampoco me pareció muy alejado (el precio no es muy barato rondará los 150-200€/noche, precio 2024)

Vuelo: Un viernes. Directo con AirEuropa desde Madrid llegada a las 10:45. La vuelta el domingo a la tarde.

Turist Card o similares. Aquí sinceramente hay que leer muy mucho dónde y cómo son los descuentos. Alguna que he visto te da acceso gratuito a muchos museos a los que tampoco se va normalmente en un fin de semana, los descuentos en los edificios o lugares más representativos son bastante pobres lo mismo en las excursiones. Así que a gusto de cada uno.

Oporto tiene 15 barrios, pero claro, en un fin de semana no se pueden ver ni dos, así que nos centramos en las siguientes zonas:

La Ribeira ubicada en el barrio de São Nicolau, el Barrio de la Sé, el más antiguo de la ciudad, donde está la Catedral, en este barrio se encuentran las raíces del original Portus Cale (Portugal). Cordoaria y Vitória donde encontramos la Torre de los Clérigos, la Igreja do Carmo o la Librería Lello y alberga además la antigua zona judía de la ciudad y uno de los miradores más típicos de Oporto, el miradouro da Vitória. El barrio de Bolhao con la avenida de los Aliados y el ayuntamiento, el mercado de Bolhao, la rua Santa Catarina, la Capela das Almas y la igreja de Santo Ildefonso

Oporto es gris, como Galicia. Ese cielo plomizo que te pone triste, pero que aquí queda inigualable en las fotos. 😍😍

Esto es lo que nos dio tiempo a hacer:

Viernes (Desde el medio día):

Lo bueno de estar en el Eurostars es que cada día para ir y volver al centro, para las visitas o para ir a cenar, tenemos que llegar hasta el Puente Don Luis I . El puente, que enlaza Oporto con Vila Nova de Gaia, se comenzó a construir en 1879 por Teófilo Seyrig (socio de Eiffel) y fue inaugurado en 1886. Con su socio, Eiffel, con quien fundó la empresa Gustave Eiffel et Cie, Seyrig diseñó en la ciudad de Oporto el Puente María Pía…Otro puente de hierro típico del siglo XIX que permitió que llegara el ferrocarril a la ciudad de oporto. En los años 30 el ferrocarril dejo de pasar por este puente, tras hacerlo durante 114 años.

El Puente Don Luis I posee dos pisos. Por el superior pasa la línea D del Metro/Tranvía y, por el de abajo, todos los demás vehículos. Hay “aceras” para que puedan pasar las personas en ambos pisos.

Una vez pasado el puente comienzan a verse las casas típicas del barrio de La Ribeira. El barrio va desde el puente Don Luis I hasta el Puente de Arrábida. Las casas de colores con balcones de hierro y la ropa tendida.

La primera plaza que nos encontramos es la Plaza de la Ribeira, justo frente a toda la zona de pequeños embarcaderos donde descansan las barcas típicas (rabelos) que te llevan al otro lado del rio o para hacer las típicas excursiones que te enseñan las bodegas. En la plaza podemos ver, la escultura de San Juan Bautista obra de João Cuteira, vigilando la plaza desde el llamado nicho da Fonte da Praça da Ribeira. Arriba al fondo de frente. Este es el zoom:

Seguimos recto y, la siguiente plaza que nos encontramos, es la Plaza Largo do Terreiro.

Seguimos la calle cuesta arriba hasta la Plaza del Infante Enrique donde tenemos el Palacio de la Bolsa y la Iglesia de San Francisco cuya entrada se encuentra justo en la parte trasera y que hace como otra pequeña plaza.

La Iglesia del Convento de San Francisco, clasificada como Monumento Nacional desde 1910, y patrimonio mundial por la UNESCO desde 1996, se construyó a principios del siglo XIV.

En 1809, durante la ocupación napoleónica, el edificio fue usado como caballeriza, sufriendo diversos daños algunos de los retablos y otros elementos. Durante la guerra civil portuguesa (1828-1834) el convento quedó destruido, conservándose solamente la iglesia. Al finalizar la guerra, los miembros de la orden franciscana fueron expulsados del país por orden del rey Pedro IV, dado que durante la contienda habían apoyado a su adversario, el rey Miguel I. En el espacio que en su día ocupaba el convento se construyó el actual Palacio de la Bolsa.

Lo más impresionante de la iglesia es el trabajo de madera con revestimiento de oro en el interior, techos y capillas, que se realizó en el siglo XVIII, todo pagado por los nobles de la época para utilizar las capillas como panteones familiares.

Con la entrada (7,5€) puedes acceder también al museo y a la iglesia do Tercios de San Francisco, una iglesia de finales del siglo XVIII.l, que está justo al lado de la de San Francisco.

De aquí nos vamos a comer a un sitio precioso de comida italiana. Puro 4050

Después de comer subimos por la calle Rua das Flores hasta la Iglesia de la Misericordia. Su construcción inicial fue en 1559, pero un rayo destruyó la fachada en abril de 1621. En 1628, fue revestida interiormente con azulejos hechos en Lisboa. La iglesia fue reedificada con el proyecto de Nasoni en 1748 en estilo barroco con formas de rococó, tras la caída de la bóveda de la iglesia.

Se puede visitar el Coro, la Nave Central, Sacristía y despachos. En la parte de arriba si hay alguna ventana abierta se pueden ver unas vistas bonitas de Oporto.

Poco a poco, ya que en Oporto todo es cuesta arriba y cuesta abajo, volvemos hacia la Plaza do Infante para visitar el Palacio de la Bolsa.

Con la entrada nos dicen que hay visita guiada, que se realiza cada media hora. Esperamos hasta las 18:30…En su interior nos enseñan diferentes salas, la Sala Árabe, que recuerda a la Alhambra de Granada, el Patio de las Naciones, la Sala Presidencial y la habitación de la Asamblea General. Espectacular

Tras la visita volvemos hacia el río y cruzamos el puente. Aprovechamos para reservar hora para visitar el domingo una de las bodegas más famosas: Sandeman. Cenamos algo en una de las muchas terrazas que también hay a este otro lado del Río Douro.

Sábado:

Hacemos el mismo recorrido que el viernes, solo que esta vez la primera parada es la Estación de São Bento o San Benito. La Estación fue inaugurada oficialmente en 1916, aunque llevaba funcionando como tal desde finales del XIX. La estación fue construida sobre las ruinas del antiguo Convento de São Bento del Ave María, y que había sido destruido en un incendio. La arquitectura del complejo recuerda a las estaciones francesas de la primera mitad del XX, y corrió a cargo de José Porto, Marques da Silva. El vestíbulo tiene unos murales con más de 20.000 azulejos pintados por Jorge Colaço. Las pinturas representan episodios de la historia de la ciudad y de Portugal: escenas campestres, batallas épicas, desembarcos y coronaciones. La estación ha sido catalogada por la revista Travel+Leisure como la 11ª estación más bonita del mundo. El acceso es gratuito ya que los murales están en el hall de la propia estación.

De la estación ponemos rumbo a la Sé, un edificio con aspecto de fortaleza con almenas y que ha sufrido numerosas modificaciones a lo largo de toda su historia. Es el monumento más antiguo de la ciudad, se eleva en un terreno donado en 1120 por la reina Doña Teresa en la parte más alta de la ciudad con lo que, desde la plaza, hay unas buenas vistas de Oporto. La entrada a la catedral es gratuita.

La construcción de la catedral comenzó en el siglo XII y, a lo largo de su historia, ha sufrido muchas reconstrucciones, por lo que presenta diferentes estilos. La mayor parte de la catedral es barroca, aunque la estructura de la fachada y el cuerpo de la iglesia son románicos, y el claustro y la capilla de San Juan Evangelista son de estilo gótico.

En su interior, la decoración muy sobria y las paredes están desnudas, exceptuando el altar mayor y algunas capillas de estilo barroco.

Al claustro de la catedral se accede desde el interior de la misma, por una puerta situada en el lado derecho. Este claustro pertenece al siglo XIV y está decorado con azulejos que reflejan escenas religiosas y de la “Metamorfosis de Ovidio”. El acceso al claustro y resto de complejo es de pago.

El conjunto arquitectónico incluye también el grandioso edificio del Paço Episcopal o Casa do Cabildo cuya construcción se remonta también al siglo XII. Aquí se encuentra el Museo Catedralicio y se expone el tesoro de la Catedral. Los domingos está cerrado.

Desde la catedral bajamos hasta las Murallas Fernandinas son las murallas medievales de la ciudad  de las que han sobrevivido algunas partes. Esta de la foto es la que se encuentra junto a la antigua puerta del sol y la estatua de Arnaldo Gama (un famoso periodista y escritor portugués)

Desde aquí en 10 minutos nos encontramos con otra iglesia increíble: La Igreja de St Ildefonso construida en 1730 sobre las ruinas de un templo medieval (inicialmente sin campanarios que fueron construidos diez años después). En la fachada, las paredes están decoradas con 11.000 azulejos con escenas de la vida de San Ildefonso. Los azulejos son de 1932.

Desde la iglesia de St. Ildefonso, subimos por toda la calle Santa Catarina (casi kilómetro y medio) llena de increíbles tiendas de chocolates y pasteles, ropa y recuerdos, cafeterías famosas con colas increíbles (Café Magestic por ejemplo) llegamos hasta la capilla de Santa Catalina (Capela das Almas) en medio de la calle y que tiene todo su revestimiento exterior de azulejo. Son 15.947 azulejos de 1929 que cubren los 360m2 de pared.

Justo al lado se ubica el café Nata Lisboa, en el que sirven las natas, unos dulces típicos, cuya receta original se mantiene como un secreto de la Fábrica dos Pasteles de Belém en Lisboa. Hay varias pastelerías famosas en Oporto, esta es una de ellas.

Estamos en el centro, recorremos la Avenida de los Aliados, rodeada de edificios modernistas, hasta llegar a la Praça da Liberdade, considerado el corazón de la ciudad. Pasamos por el ayuntamiento y la iglesia de la Santísima Trinidad del siglo XIX.

Subimos hasta a la Iglesia y Torre de los Clérigos

La historia de la iglesia de los clérigos se remonta a la Hermandad de los Clérigos Pobres constituida en Oporto como fusión de tres organizaciones benéficas que ya existían en la ciudad durante el siglo XVII para socorrer a los clérigos en dificultades.

En la Iglesia destaca una imagen del arcángel S. Miguel a la entrada y el retablo de la Capilla Mayor de cuatro colores.

El campanario, proyecto de Nicolau Nasoni, fue construido en mitad del siglo XVIII. Subimos a la torre (6 pisos y 75m de altura, unos 225 escalones) para disfrutar de unas magníficas vistas del centro de la ciudad.

El primer piso alberga la sacristía, el segundo alberga la sala de las campanas, (seis campanas que tocan regularmente para anunciar las horas del día y las misas). El tercer piso cuenta con una galería que ofrece vistas panorámicas de la ciudad, el cuarto es un espacio reservado para el reloj, el quinto piso es una sala de exposiciones y, el sexto y último, es la cima de la torre, desde donde se pueden ver vistas impresionantes de la ciudad y del río Duero. Aquí encontraréis más información sobre la torre (Se puede comprar el ticket on line y hacer visita nocturna)

Bajamos de la Torre y comemos en un pequeño restaurante en la calle de Sao Felipe de Nery.

A 5 minutos andando se encuentra la librería Lello e Irmão, situada en un edificio neogótico de 1906, en pleno centro de la ciudad. Es una de las más bonitas del mundo, y en ella se inspiraron algunas escenas de los libros de “Harry Potter” y que es otro de los imprescindibles. Por cierto para entrar en la librería hay cola! Y se paga entrada que luego si compras (un libro por ejemplo) se descuenta a tu compra.

Al salir de la librería vamos hasta la plaza Gomes Teixeira con la fuente de los Leones y detrás, la Iglesia do Carmo.

La gran fachada lateral de la Iglesia do Carmo está totalmente forrada con un gran mural de azulejos elaborado en 1912, en el que se representa la Imposición del Escapulario en el Monte Carmelo, dibujado en azul y blanco al igual que los típicos mosaicos que se pueden ver en muchos otros edificios históricos de Oporto.

No entramos a la iglesia, ¿demasiadas iglesias? Quizá si.

Nos topamos con otra increíble pastelería donde tomamos un café: Atelier Castro

Cenamos otra vez en Vila Nova de Gaia. Pero esta vez en el mercado Beira-Rio un lugar como la Boqueria o Santa Catalina en BCN o el mercado de San Miguel en Madrid , muchos puestos normalmente de producto local y mesas corridas para comer/cenar. Mucha gente/muchas colas…bueno como en cualquiera de los mencionados de Barcelona o Madrid.

Domingo

Hoy decidimos utilizar el funicular y el teleférico.

La forma más cómoda de llegar hasta el barrio de Batalha, justo detrás de la Catedral , es utilizar el Funicular dos Guindais (que nos queda a medio camino entre el hotel y el puente de Don Luis) y vale 2,5€ así que perfecto 👌🏻 la verdad es que salimos muy muy pronto del hotel para aprovechar ya que la visita a las bodegas es a las 10:45.

Paseamos por el antiguo barrio do Barredo. Situado entre la Catedral y la orilla del Duero, este barrio está un poco deteriorado. Las calles responden a la herencia medieval de Oporto: trazado irregular, callejones estrechos y oscuros que no van a ningún sitio, escaleras, edificios que parece que se vayan a caer.

Bajamos hasta Vilanova de Gaia atravesando el puente Don Luis I. Subimos una pequeña cuesta hasta el Mosteiro da Serra do Pilar

El Monasterio de la Sierra del Pilar, que es Patrimonio Mundial de la UNESCO y símbolo de Gaia, conserva una iglesia y claustro, de planta circular, ejemplos únicos en Portugal. Tardó 72 años en terminarse. Estaba cerrada ya que abren a las 10h.
Frente a la Iglesia hay un mirador con unas preciosas vista de Porto y el Río Douro.

En la parada Jardín do morro utilizamos el teleférico para bajar hasta Cais do Gaia, junto a las bodegas, en la Avenida Ramos Pintoya, ya que hoy tenemos una visita guiada a una de las más famosas bodegas: Sandeman. La visita merece mucho la pena. Nosotros la hicimos a las 11 de la mañana. Me gustó mucho. Hay diferentes tipos de visitas a diferentes precios. Con una duración aprox entre 50min -90 min con degustación. El precio mínimo son 21€

Tras la visita, hacemos una excursión por el río Douro , creo que la excursión se llama los seis puentes o algo así, no me pareció nada del otro mundo, el caso que al no ser verano, hacía frío y no estaba muy agradable, quizá en verano esta ok.

Comemos en la orilla opuesta, en la Ribeira, y volvemos al hotel para recoger las maletas.

Nos faltó un par de días más, o al menos uno. Es decir, Oporto es ideal para un puente. Poder ir a la Foz do Douro, la zona que comienza en la desembocadura del río Duero y que llega en un paseo por toda la playa, hasta el Castelo do Queijo, una de las dos fortificaciones que encuentran en esta zona, además del Forte São Jão Baptista. Por cierto en Foz do Douro está uno de los restaurantes con estrella michelín de Oporto: Pedro Lemos. Quién sabe…quizá en otra visita.

Bonito sitio gris y lluvioso.

Hasta aquí el resumen del fin de semana en Oporto. Gracias por leer 🙏🏻